Españoles, malagueños en concreto y amantes del baloncesto en general: "Aíto ha sido despedido".
La noticia era más que esperada ya que el ambiente estaba enrarecido y la situación era insostenible en un equipo que venía sufriendo una decadencia, tanto en juego como en mentalidad, y que pasó de estar 6-3 y casi metido en la Copa del Rey a sólo ganar 2 de sus siguientes 8 encuentros, quedándose fuera de la disputa del torneo del KO por segundo año consecutivo.
Aíto llegó a Málaga con uno de los mejores historiales que nunca se habían visto y dos años y medio después ha sufrido la primera destitución de su dilatada carrera. No ha sido una época fácil ya que en Málaga no ha funcionado salvo en momentos puntuales.
Su personalidad chocó con la de algunos jugadores y la aptitud de estos ha sido francamente mala dentro y fuera del campo. Si a eso le añadimos el malestar de la afición, con un sector muy crítico a su pasado desde que cogió a Unicaja, el final se veía cerca.
Con esto no quiero exculpar al técnico. A buen seguro parte de culpa tendrá en ello. Al fin y al cabo esos jugadores que han rendido muy por debajo de las expectativas fueron fichados expresamente por su deseo y con uno de los mayores presupuestos de la ACB solo ha conseguido el 10º puesto en la primera vuelta.
¿Realmente tiene Unicaja peor plantilla que más de la mitad de equipos?
Esa ha sido la gota que colmó el vaso. Pero lo cierto es que la etapa de Aíto en Málaga empezó muy diferente.
En su primer año, con una plantilla heredada casi en su totalidad del anterior técnico, Sergio Scariolo, cuajó una temporada más que decente que por algunas jugadas puntuales no llegó a ser magnífica, después de perder en la prórroga en la final de la Copa del Rey ante el TAU Cerámica, caer en el Top 16 por diferencia de dos puntos o perder en semifinales ante el Barcelona en el tercer encuentro en el Palau en la prórroga tras haber tenido bola para llevarse el encuentro en la última posesión.
En su segundo año las expectativas eran altas pues se incorporaban jóvenes jugadores por explotar y era de todos conocidos la capacidad del madrileño para sacar lo máximo de los jugadores noveles. Pero una serie de lesiones en pretemporada rompieron la preparación del equipo y el mal inicio de campaña, con cinco derrotas en las cinco primeras jornadas de liga llevaron a Unicaja a quedarse sin jugar la Copa del Rey. Pero el equipo poco a poco fue creciendo y terminó la temporada cumpliendo los otros dos objetivos, Top 16 y semifinales de ACB.
Al comenzar este año parecía que la situación se reconducía pues el equipo estaba con el balance de 6-3 a favor en liga y bien posicionado en Euroliga ganando al Olympiacos. Pero en los últimos dos meses el equipo fue perdiendo confianza, la afición se volvió a poner de uñas con el equipo, pero sobre todo con el entrenador y la situación ya se antojaba insostenible en el Carpena. Tanto que jugar en casa ya no era una ventaja, más bien al contrario.
Ese mismo ambiente se vivió este domingo en el decisivo encuentro ante el Gran Canaria donde Unicaja necesitaba ganar y además con una diferencia amplia si quería acceder a la Copa del Rey y no fue capaz de superar los 50 puntos.
Esa sensación de atenazamiento que reflejó el equipo y la falta de ideas, han hecho pensar al club que lo mejor era un cambio de aires en el banquillo en busca de nuevas ideas para ver si un nuevo entrenador es capaz de sacar mayor rendimiento a esta plantilla.
¿Realmente tiene Unicaja peor plantilla que más de la mitad de equipos?
Esa ha sido la gota que colmó el vaso. Pero lo cierto es que la etapa de Aíto en Málaga empezó muy diferente.
En su primer año, con una plantilla heredada casi en su totalidad del anterior técnico, Sergio Scariolo, cuajó una temporada más que decente que por algunas jugadas puntuales no llegó a ser magnífica, después de perder en la prórroga en la final de la Copa del Rey ante el TAU Cerámica, caer en el Top 16 por diferencia de dos puntos o perder en semifinales ante el Barcelona en el tercer encuentro en el Palau en la prórroga tras haber tenido bola para llevarse el encuentro en la última posesión.
En su segundo año las expectativas eran altas pues se incorporaban jóvenes jugadores por explotar y era de todos conocidos la capacidad del madrileño para sacar lo máximo de los jugadores noveles. Pero una serie de lesiones en pretemporada rompieron la preparación del equipo y el mal inicio de campaña, con cinco derrotas en las cinco primeras jornadas de liga llevaron a Unicaja a quedarse sin jugar la Copa del Rey. Pero el equipo poco a poco fue creciendo y terminó la temporada cumpliendo los otros dos objetivos, Top 16 y semifinales de ACB.
Al comenzar este año parecía que la situación se reconducía pues el equipo estaba con el balance de 6-3 a favor en liga y bien posicionado en Euroliga ganando al Olympiacos. Pero en los últimos dos meses el equipo fue perdiendo confianza, la afición se volvió a poner de uñas con el equipo, pero sobre todo con el entrenador y la situación ya se antojaba insostenible en el Carpena. Tanto que jugar en casa ya no era una ventaja, más bien al contrario.
Ese mismo ambiente se vivió este domingo en el decisivo encuentro ante el Gran Canaria donde Unicaja necesitaba ganar y además con una diferencia amplia si quería acceder a la Copa del Rey y no fue capaz de superar los 50 puntos.
Esa sensación de atenazamiento que reflejó el equipo y la falta de ideas, han hecho pensar al club que lo mejor era un cambio de aires en el banquillo en busca de nuevas ideas para ver si un nuevo entrenador es capaz de sacar mayor rendimiento a esta plantilla.
Según diario Sur llega Chus Mateo –excelente segundo entrenador pero con poca fortuna de primero y de amargo recuerdo para los que lo tuvimos en CAI Zaragoza-, que ya conoce la casa tras estar a la sombra de Sergio Scariolo en la época más dorada del club. Su ayudante será Paco Aurioles, entrenador de gran éxito los últimos años en Axarquía, un hombre de la casa y una apuesta firme para reflotar el equipo.
Unicaja tiene la oportunidad de empezar a consolidar una estrategia de futuro propia del club, ajena a técnicos severos de turno. Una ocasión histórica para cambiar en estas 17 jornadas de rumbo y volver a ser un club con personalidad y proyecto para un futuro. Pero es necesario analizar la situación con frialdad y asumir que la crisis deportiva que están viviendo no es más que una pequeña parte del problema interno. Lo grave es su terrible falta de identidad de los últimos años y el cada vez mayor desapego de los aficionados –parte activa de la institución- , que han pasado de la indignación a la indiferencia en el más triste de los tránsitos.
Unicaja tiene la oportunidad de empezar a consolidar una estrategia de futuro propia del club, ajena a técnicos severos de turno. Una ocasión histórica para cambiar en estas 17 jornadas de rumbo y volver a ser un club con personalidad y proyecto para un futuro. Pero es necesario analizar la situación con frialdad y asumir que la crisis deportiva que están viviendo no es más que una pequeña parte del problema interno. Lo grave es su terrible falta de identidad de los últimos años y el cada vez mayor desapego de los aficionados –parte activa de la institución- , que han pasado de la indignación a la indiferencia en el más triste de los tránsitos.
Última rueda de prensa de Aíto.
Texto: Sobre la Bocina / Encancha.com / Basketconfidencial.com
Fotos: Eldesmarquemalaga.es / ACB.com
Video: Diariosur.es
Yo me he ido de un equipo porque no soportaba al entrenador. Y como entrenador también me han echado tras dos míseras jornadas, así que sé lo que puede pasar por la cabeza de jugadores y entrenador.
ResponderEliminarEn mi experiencia como entrenador, al más puro nivel pachanguero, me dí cuenta tras el primer partido que había perdido al grupo.
Es una situación complicada, porque por un lado no puedes ceder a los intereses de jugadores y directivos y convertirte en una marioneta.
Por otro lado ves como tus jugadores no confían en tus métodos de trabajo, y su lenguaje corporal pide clamorosamente un cambio.
En esta situación creo que lo mejor que puede hacer un entrenador es no plegarse a los deseos o exigencias de nadie, y confiar en su trabajo, hasta el fin.
No pasa nada. Nadie va a cuestionar a Aito como entrenador a estas alturas. Unas puertas se cierran y otras se abren.
El cambio era obligado y la gran trayectoria de Aíto no iba a originar ningún cambio. Tristemente, porque lo admiro, creo que en Málaga no ha trabajado a la altura de su pasado y su brillantez táctica ha sido escasa. Tampoco ha sabido llevar al grupo y ha tomado decisiones discutibles, además de colaborar en armar una plantilla sin todos los huecos tapados. Esto no es, obviamente, solo 'culpa' suya.
ResponderEliminarConfío en Chus Mateo, del que yo no guardo un tan mal recuerdo (será porque no lo conocí solo como un mero entrenador), y en Paco Aurioles, un tipo cercano que sabe la tira de esto
Veremos que pasa mañana en Euroliga y el domingo ante el CAI (en ambos partidos estaré en el Carpena)
Saludos desde Puertatrás.
Esta claro que Aíto es un gran entrenador pero creo que sus jugadores han acabado por no confiar en él.
ResponderEliminarUna lástima teniendo la plantilla que tiene. Por cierto, Printzesis estaba marginado por Aíto no?
Saludos!
@J-Bo: gracias por compartir tus vivencias. Se ve que tienes mucha experiencia en este asentido, en las dos direcciones.
ResponderEliminarCreo que lo defines perfectamente, esta salida no debe ni puede jubilar a Aíto tal y como dejaban caer desde algunos sitios.
Los jugadores se negaron a jugar al 100% desde hace jornadas y el fue hasta el final con sus ideas. Dicho esto lo más fácil es cambiar al entrenador, aunque sea una eminencia.
@ Pueratras: Yo también he notado que faltaban sus típicas defensas que practicaba en Barça o en la Penya. Otras veces veía más trabajado al equipo. Esto lo digo tras ver 4/5 partidos de Unicaja en lo que va de liga. Así que tampoco me puedo guiar del todo.
Desde luego también vi y leí de mucha gente que los jugadores deambulaban por la pista como almas errantes. Así que aunque tengas muy trabajado al equipo si ellos no quieren competir... Es como la pescadilla que se muerde la cola.
@Joaquin5: Supongo que ahora Printzesis jugará, me parece un jugador muy aprovechable. Y sino con el nuevo fichaje del Madrid que envien a Garbo a Unicaja, a Mirotic al CAI con los numerazos que está haciendo y Pablo Aguilar al Granada. Anda que no sueño.
Muchas gracias por comentar a todos. Saludos.