Hoy os traigo una investigación de Alberto Baena, Jesús Baena y Borja Del Pozo sobre la frecuencia y cantidad de faltas personales que se realizan a lo largo de los 40 minutos que dura un partido de baloncesto. Un estudio que me pareció muy interesante para conocer la correlación de las faltas en sus respectivos minutos y su variación a lo largo de todo el encuentro.
INTRODUCCIÓN
Definir el estilo de juego de un equipo de baloncesto es una tarea compleja al estar determinada por multitud de factores, los cuales varían dicho estilo transformándolo.
Ibáñez y col. (2003) afirmaban que las respuestas motrices ofrecidas entre jugadores y jugadoras son similares, pero encontraron diferencias en el comportamiento en función del género. Esta diferencia en el juego puede ser un factor que influya en la cantidad de faltas señaladas. Se conoce que la presión percibida por los árbitros es un factor a tener en cuenta en el fenómeno del “home advantage”. Marshall (2007) afirma que los árbitros responden a la presión del público favoreciendo al equipo local mediante la señalización de faltas. Sin embargo, Pollard & Pollard (2005) no incluyen el arbitraje entre las tres principales razones que determinan las ventajas del factor cancha.
Hasta nuestro conocimiento, no consta ningún estudio previo que analice dichas variables por ello, el objetivo del presente trabajo es conocer si estos factores son relevantes para el arbitraje.
MÉTODO
Se han estudiado un total de 192 partidos de la fase regular del Campeonato de Cataluña Cadete Preferente. Durante la temporada, se hizo jornada a jornada un registro de las faltas de cada equipo reflejadas en las actas oficiales de los encuentros. Se tuvo en cuenta el género de la competición (masculina o femenina), qué equipos participaban, si estos jugaban como local o como visitante, la acumulación de faltas por minuto, los totales por periodo y el total final. Una vez recopilados los datos, se llevó a cabo un estudio descriptivo.
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
En la figura 1 se observa la evolución de las faltas en los puntos estudiados, así como máximos y mínimos. Principalmente, se encuentran valores muy bajos en los comienzos de periodo (estando mucho más marcado el inicio del primer y tercer periodo) y registros muy altos al final del partido (min. 40). Debemos mencionar que al estudiar la variable jugar como equipo local o como equipo visitante, no se ha encontrado ninguna diferencia significativa que distinga las faltas señaladas. Los resultados obtenidos apuntan a la existencia de momentos claves caracterizados por la poca frecuencia de faltas. Existen diferencias significativas entre los partidos masculinos y femeninos. Estas diferencias las encontramos en los minutos 18, 22, 26 y 32, en el total de faltas señaladas en el 3º periodo y en el total de faltas por partido.
CONCLUSIONES
La baja frecuencia de faltas al inicio de cada periodo puede deberse a una menor intensidad tras el comienzo del juego.
- No me parece muy oportuna esta conclusión ya que la intensidad suele ser alta también al empezar -siempre hay casos opuestos pero hablamos en terminos medios-. Además a mi modo de ver, la tensión de los últimos minutos de cada cuarto no hace cometer más faltas. Quizás solamente al final del partido, pero también hay casos en los que interesa defender sin falta y así se hace. De este modo, el resultado de que haya más faltas en los finales de cuarto lo achacaría principalmente a estos dos motivos:
- En los primeros minutos los jugadores vienen de un descanso previo entre cuartos y al estar “frescos” pueden defender con “piernas” siendo la forma permitida por el reglamento. Sin embargo en los últimos minutos la fatiga hace que las piernas no respondan igual y se tenga que meter la mano o el brazo con más insistencia para frenar al defensor. Además hay que tener en cuenta que el estudio es de cadetes y la preparación física no es tan exigente como seniors.
- En ocasiones los equipos llegan a los últimos segundos del cuarto con menos de 4 faltas realizadas –no están en bonus-, lo que les permite realizar una o más faltas para dificultar el ataque rival y llevarles a que tiren casi sin tiempo.
Sigue el texto: En el caso del género masculino, son más relevantes los picos bajos de valores en relación al número de faltas, pero sólo al inicio de cada periodo. En el resto de minutos son mayores las frecuencias. Esta diferencia puede deberse a un ritmo más constante de juego.
- Aquí sí que estoy de acuerdo. El juego más físico y el ritmo más elevado en hombres que en mujeres pueden ser las causas de esta diferencia.
Sigue el texto: Destacar la inexistencia del fenómeno “home advantage” en la señalización de faltas de este estudio contradiciendo estudios anteriores en los que el factor cancha favorecía al equipo local. (Pollard & Pollard, 2005; y Marshall, 2003).
- Esto se podría explicar porque al tratarse de cadetes no es tan manifiesta esta ventaja que incluye la territorialidad, viajes, familiaridad, público y reglas. Sería muy interesante que este mismo estudio se realizara en categoría profesional y comparar los datos para obtener conclusiones mucho más esclarecedoras.
Texto y figura: Análisis de la frecuencia de faltas señaladas en función del género y el "home adventage" en categoría Cadete. Alberto Baena, Jesús Baena y Borja Del Pozo. V Congreso Ibérico de Baloncesto. Cuadernos de Psicología del Deporte. 2009 Vol.9.
Foto: Nosotrosmismos
Interesante.
ResponderEliminarPero el análisis se centra en la responsabilidad de los jugadores y no en el comportamiento de los árbitros. Digo... que quizá también los árbitros dejan jugar más al principio de los cuartos. Por dar otra razón, aunque se supone que estos siempre pitan lo que ocurre.
Saludos desde Puertatrás
El análisis es de las faltas en el partido. Puede estar la visión de que los jugadores las cometen (el enfoque que se da y también he querido analizarlo así) o que son los árbitros los que pitan algunas y otras no(que sería otro cauce)...
ResponderEliminarCreo que al tratarse de una investigación seria, no se puede decir que los árbitros dejer jugar más y otars veces menos según que momenyto del partido. Además es algo que se dice como aficionados.
Un saludo.
Saludos.